sábado, 26 de junio de 2010

LA GUERRA HISPANO-SUDAMERICANA (lV): LOS COMBATES

Vamos a ver aquí la relación de sucesos bélicos de esta mini guerra. En posterior entrada expondremos las reflexiones pertinentes. Tras lá campaña algunos datos sobre muertos y destrucciones.
El combate de Papudo
El comandante de la escuadra chilena Williams Rebolledo, en la corbeta Esmeralda, esperó cerca de Valparaíso a la goleta española Covadonga, al mando de Luis Fery. El 26 de noviembre se avistan. Rebolledo ideó un engaño por el cual expuso la bandera británica. Cuando estaban ya muy cerca, cambió el estandarte por el chileno. La Covadonga ya no puede huir y el capitán chileno Manuel Thomson, es el encargado por Rebolledonpara tomar la nave. Trtas saber la noticia en la flota española, el almirante Pareja se sumió en una fuerte depresión y se suicida. Eran tiempos de honor romántico y suicidio fácil.
El combate de Abtao
Perú envía su flota a Chile. La flota chilena la componían las naves: Esmeralda, Maipú y la recién apresada Covadonga. La peruana era algo mejor, aunque incompleta: las naves Apurímac, Amazonas, Unión y América. Esperaban la unión de dos buques insignias adquiridos en Europa y acorazados: Huáscar e Independencia. Ambas naves no llegaron a tiempo para participar en esta guerra.
Esta flota se encuantra con las naves españolas Villa de Madrid y Blanca, mandadas por Juan Bautista Topete. La flotilla se refugia en la accidentada costa de las islas Chiloé. Las naves españolas no pueden penetrar en un medio desconocido. Deciden esperar a Méndez Núñez que llegaría con la acorazada Numancia. Intrépidamente se metió entre los arrecifes y esperó la salida de la flota sudamericana. Tras no tener respuesta y, por las nieblas y temor a encallar, deciden retirarse. En las cercanías apresaron al chileno Paquete del Maule, con similar número de prisioneros al Covadonga. Era la respuesta al engaño de Papudo.
El bombardeo de Valparaíso
En vista de no poder combatir en campo abierto, Núñez decide bloquear la costa de Chile con bombardeos de puertos. Sólo efectuó el bombardeo de Valparaíso. Núñez estaría contrariado por no poder combatir en campo abierto y no debió de serle agradable atacar una ciudad indefensa. Tras enviar un ultimátum a Chile solicitando la devolución de la Covadonga y de algunos puntos más, decidió dar tiempo para que la población evacuase la plaza y se pusiesen banderas blancas en edificios como iglesias u hospitales. Se bombardarían instalaciones de almacenes y de tipo estratégico. El fin era hacer daño sin número de víctimas. Hubo dos muertos. Muy lejos del bombardeo cobarde que se dijo en su momento.
Una flota extranjera, estadounidense, francesa y británica, fondeada en ese puerto y, deseando evitar el bombardeo, acaba retirándose ante la negativa de Méndez de suspender el castigo. El 31 de marzo las naves Villa de Madrid, Vencedora, Blanca y Resolución, bombardean la ciudad durante dos horas. La población chilena intentó linchar a los prisioneros de la Covadonga. El gobierno chileno decide la expulsión de estos para evitar hechos similares.
La folta española decide dirigirse a El Callao para buscar un enfrentamiento bélico de verdad.
La lucha de El Callao (Lima), el día 2 de mayo de 1866
Méndez Núñez se presenta en la costa limeña en abril. En la isla San Lorenzo (islote situado a unos cinco kilómetros justo enfrente del El Callao, junto a otra menor aún llamada Frontón) desembarcan para preparar la operación bélica.
La flota española la componen las naves de guerra: Numancia, Blanca, Resolución, Berenguela, Villa de Madrid, Almansa, Vencedora, además de algunas naves auxiliares de la dicha flotilla. Se disponen en tres partes, norte, sur y centro, en paralelo a las torres artilladas organizadas por José Gálvez. El viejo Real Felipe, la dieciochesca fortaleza española, testigo de vigilancia frente a piratas y último bastión de la resistencia española en enero de 1826 tras la rendición de Rodil, quedaba de nuevo como espectador de una lucha entre peruanos y españoles.

Fuerte del Real Felipe, actual museo del Ejército peruano.

Las fuerzas peruanas disponían de un sistema de torres artilladas con los temibles cañones Armstrong y Blakely. También estaban las naves Sachaca, Colón y Túmbez, pero apenas pudieron salir del puerto ante el nutrido fuego español. También se organizó una fuerza de tierra ante un hipotético desembarco. A inicios de la mañana se inició el bombardeo. Ahora Núñez tenía la ocasión de combatir en condiciones de igualdad. Los episodios anteriores le debieron dejar ansioso de esta lucha. En ese siglo de honores y tratándose de militares de marina pues se comprenderá lo que pasaría por la mente del marino gallego.
En ese momento, el gobierno español, comprendiendo la gravedad del asunto y de que había llegado muy lejos, decidió enviar un emisario vía Panamá a Perú para ordenar a Don Casto a retirarse. Al comunicar con el alférez de navío Álvarez de Toledo, que traía la orden de retirada, el gallego le respondió algo como (en palabras de Galdós): "Mañana 2 bombardeo El Callao. Usted no ha llegado todavía; llegará pasado mañana, y en cuanto me comunique la orden del Gobierno, me apresuraré a obedecerle". Como vemos el bombardeo fue obstinación de Don Casto, fue el que llevó al combate. Cuestión de honor de aquél tiempo. Una cuestión que entrañaba riesgos fuertes y grandes: desproporción de fuerzas artilladas y sin costa de avituallamiento entre Lima y ¡Filipinas! Está visto que Núñez quería entrar en la historia. Y lo consiguió.
A media mañana abrió el fuego contra las torres limeñas. Hacia las 12,30 una granada alcanzó a Núñez. Que tuvo que ser atendido y retirado al camarote.

Méndez Núñez es herido en combate
Recreación del camarote de la Numancia.
Mobiliario instalado en el Museo de Pontevedra


Hacia las 13 horas, la Blanca dispara y acierta en el polvorín de la Torre de La Merced, explotando esta. La explosión fue muy cruel por la cantidad de ilustres víctimas, al ser una torre de mando. Se calculan unos cuarenta muertos. Entre ellos falleció el ministro José Gálvez y varios oficiales, entre ellos, (y aquí lo paradógico de esta guerra) el coronel Toribio Zabala, limeño pero de origen español criollo. Lo curioso es que los Zabala se dividieron tras la guerra de la Emancipación, pues este Don Toribio optó por la nacionalidad peruana, mientras su hermano, Juan Zabala, optó por la española, siendo héroe y general de las guerras carlista y de la guerra marroquí. En estos momentos vivían ambos hermanos (el español era, precisamente, el ministro de Marina), por lo que el peruano supo de las hazañas de su hermano en España y África, además de su ministerio, y el limeño, pero español de residencia, debió quedar consternado al saber de la explosión de La Merced. Paradojas de dos países que aún hacía poco tiempo relativo de sus guerras de independencia. Pensemos en la rama de los Goyeneche, divididos entre el españolismo y la nueva república peruana.
Hacia la caída de la tarde y de la garúa limeña, a las 16 horas, con los buques españoles tocados, pero ninguno hundido, se decide dar por finalizada la operación. Según testimonios sólo la Torre de Santa Rosa respondía.
Final del combate
Como es normal, ambas partes exageraron el combate. Ambas se dieron la victoria en sus diferentes periódicos. Los peruanos adujeron que los españoles habían sido humillados y la ionvasión abortada. Los españoles adujeron que sólo querían un castigo y se dieron la victoria por haberlo conseguido.
Las informaciones periodísticas estadounidenses hablan de victoria peruana, se nota el americanismo. Las fuentes francesas se aproximan a las españolas. es normal, recordemos que esos años la Francia de Napoleón III era aliada de la España de Isabel II.
De todas formas las dos fuentes hablan de la audacia española frente a los temibles cañones peruanos y la falta de avituallamiento desde hacía varios meses.
Las víctimas del 2 de mayo
También la guerra de cifras que se discuten para minimizar o no la miniguerra del Pacífico.
A) Las víctimas peruanas
En algúna fuente peruana se llegó a aceptar la cifra de ochenta muertos. Las fuentes extranjeras hablan de entre doscientos y cuatrocientos muertos y heridos. Las estimaciones españolas hablan de los mismois números. las bajas debieron de ser algo elevadas.
B) Las víctimas españolas
Se admitió el número de 43 muertos.

Hasta aquí los acontecmientos bélicos. En una próxima entrada trataré sobre las firmas de las diferentes paces con los diferentes países beligerantes, aunque en realidad, la guerra efectiva fue solo contra Chile y Perú, sobre todo con el Perú. Ecuador y Bolivia fueron beligerantes simbólicos. También haremos algunas reflexiones finales para tratar el tema con la fuente literaria galdosiana.


12 comentarios:

CAROLVS II, HISPANIARVM ET INDIARVM REX dijo...

Amigo Juan, excelente entrada, nos estás trayendo todos los hechos de esta desconocida guerra, de la que por ejemplo yo conocía, y mínimamente, el bombardeo de Valparaíso y de El Callao que da nombre a la madrileña plaza...como dices eran tiempos de honor y debió de estar aún en el recuerdo la guerra de emancipación ocurrida apenas 40 años antes...quien sabe si la España isabelina pensaba que aún podía recuperar los perdido en aquellas guerras de emancipación o al menos mantener su protagonismo en la zona...

Un saludo.

Cayetano dijo...

Muy buena entrada.
Era un absurdo y un despropósito mantener a sangre y fuego y a toda costa un imperio que se les había ido de las manos. Humillaciones y muertos para lavar la deshonra de la reina castiza.
A todo esto, El Callao es para el común de los madrileños no una "famosa" batalla sino el lugar donde quedar para ir de marcha.
Un saludo.

Juan dijo...

Hola amigos, gracias por vuestros comentarios.
Carlos II. Me alegro que aprendas algo del siglo XIX. La Historia Contemporánea también es importante como la Moderna.
Cayetano. En efecto, una brabuconada del gobierno de O´Donnell, tan aficionado a las expediciones épicas por América: Santo Domingo, México o esta guerra, junto a las de Indochina y Marruecos. Don Casto fue empujado a sacar los colores de la reina con su "hazaña".
Saludos y buen domingo.

J. Eduardo V. G. dijo...

A México por lo del pago de la deuda que el gobierno mejicano se nengaba a pagar, creo que fue con el general Prim al que mandaron con un destacamento de apoyo a los franceses y Maximiliano, que no entró en lucha y pronto volvió a La Habana.
Un saludo

Juan dijo...

Hola José Vicente, paisano de Cisneros, pues sí, se firmó en Londres un pacto entre Reino Unido, Francia y España para cobrar las deudas del Mexico de Juárez. Desembarcó Prim en 1862 en San Juan de Ulúa (Veracruz) y avanzó hasta Orizaba, en el camino de Ciudad de México. En abril de ese año firmó la Convención de la Soledad, por la que renunciaba a la guerra con México y se retiró al sospechar que los franceses querían apoderarse de México, poniendo a un títere como Maximiliano de Habsburgo. Como siempre, la prensa nacionalista española le puso a parir por cobardía, cuando en realidad dió una lección de prudencia. El final es sabido, tras retirarse españoles y británicos, los franceses se quedaron solos y Maximilano acabó fusilado en Querétaro.
Saludos Eduardo.

Freddy Gómez dijo...

Hola estimado Juan. En verdad, es muy interesante leer a españoles comentando sobre la Guerra de 1865-66. Trágico lo de los Zabala. No sabía que Méndez Núñez había sido herido en el Combate del Callao. Los peruanos cantaron victoria porque la escuadra española fue la que dejó de disparar y se batió en retirada cerca de las 5 de la tarde.

Saludos desde Lima.

José Luis de la Mata Sacristán dijo...

mucho honor y mucha historia pero ese tío bombardeó una ciudad por sus santos h____ lo cual no tiene justificación ninguna.

J. Eduardo V. G. dijo...

Aunque títeres, Maximiliano y Jose I (Pepe Botella), por la forma de llegar al poder, creo que no hubieran sido malos gobernantes.
Una pregunta, el general Prim, no fue mandado tambien a la Conchinchina de apoyo a los franceses, creo haberlo visto en algún sitio.
Saludos

Juan dijo...

Hola José Luís, el bombardeo le fue ordenado desde Madrid. El bombardeo de El Callao sí que pudo haberlo evitado, pues desobedeció al enviado del gobierno.
Saludos.

Juan dijo...

Hola Eduardo. Maximiliano es posible que hubiese sido un adelanto de lo que fue la época de Porfirio Díaz. Sobre la expedición a Indochina no estoy seguro, pero creo que no fué Prim, aunque, insisto lo tendré que leer con más detenimiento.
Saludos.

Carlos el Narrador dijo...

Buen día Juan

Hoy luego de tiempito, vi un comentario tuyo en el blog del Amautacuna.

Te diré que sobre el puerto de El Callao y el fuerte del Real Felipe, se realizó una película peruana, en animación 3D, llamada: Piratas en el Callao.

Cuestión aparte, por ahora estoy enfrascado en la lectura de un libro sobre títeres, acerca de García Lorca, Manuel de Falla y la Tía Norica. Saludos amigo.

Carlos el baterillero

Juan dijo...

Hola Baterillero, que grato es saber de usted. Como residente de El Callao, estás a la última del puerto limeño. Desde luego eres todo un lector como pude observar en Lima cuando nos reuníamos los historiadores en aquellas veladas inolvidables. Espero te hayan interesado estas entradas sobre esta desgraciada guerra.
Saludos desde Madrid.